Estudiar una maestría puede ser costoso, llevar mucho tiempo y ser emocionalmente agotador. Por lo tanto, debes sopesar bien tus razones cuidadosamente.
Como regla general, estudiar una maestría es más barato que hacer una licenciatura, aunque las tarifas varían ampliamente.
En la mayoría de los casos, los estudiantes internacionales pagan más por los cursos. La excepción a esta regla es el MBA, que es uno de los programas más caros que existen.
En una nota positiva, los graduados de maestría ganan considerablemente más que sus contrapartes de licenciatura.
Estadísticas sobre el mercado laboral de graduados del 2017 informa que los graduados de tiempo completo empleados y en edad laboral tenían un salario promedio de $93,7865 en 2017.
En comparación con $79,3578 para estudiantes universitarios en edad de trabajar.
A pesar de esto, debes pensar profundamente por qué quieres seguir un estudio de maestría antes de comprometerte.
Muchos solicitantes creen erróneamente que una maestría mejorará automáticamente su carrera y les permitirá ganar más, pero esto solo es cierto si la calificación realmente los acerca al cumplimiento de sus ambiciones.
Para estar seguro de que el estudio de posgrado cumplirá con tus expectativas y valdrá la pena el trabajo y costo, considera lo siguiente:
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Considera todo en el contexto de tu plan de carrera general, asegurándote de que la calificación ofrezca la mejor manera de alcanzar tus objetivos profesionales más avanzados.
Considera si el estudio de maestría aumentará tus credenciales significativamente por encima de tu educación de licenciatura existente
Ponte en contacto con los servicios profesionales, organismos profesionales o empleadores individuales para obtener más información.
Si desea estudiar una maestría inmediatamente después de completar tu licenciatura, analiza bien tus motivos.
No debe seguir un posgrado con la esperanza de que se agregue automáticamente a tu CV o porque necesitas más tiempo para pensar en tu carrera.